Sobre Zohran Mamdani

Pablo Pérez Wilson
Las primarias municipales celebradas recientemente en la ciudad de Nueva York arrojaron como ganador preliminar a Zohran Mamdani. El representante al congreso estatal de Nueva York obtuvo casi medio millón de votos superando con claridad al ex gobernador del estado de Nueva York Andrew Cuomo. Esta victoria refleja la creciente viabilidad electoral de Socialistas Democráticos de América (DSA por sus siglas en inglés).
El programa de Mamdani apunta a fortalecer el papel de la gobernación de la ciudad para encarar el creciente costo de la vida. Congelar arriendos, transporte público gratuito, abastecimiento de comida, la creación de un programa de seguridad comunitaria y vivienda pública son sus principales propuestas. Las propuestas apuntan a dirigir recursos e instituciones públicas en una dirección diferente al consenso demócrata caracterizado por la trenza entre poderes burocráticos y políticos establecidos y los capitales financieros, inmobiliarios y tecnológicos de la así llamada capital del siglo veinte.
El congelamiento de arriendos es la propuesta central dentro de las prioridades de Mamdani y un buen ejemplo de su visión para la ciudad. Nueva York estableció en 1943 un sistema de renta controlada que funciona con arbitrio público. Alzas en el costo del alquiler de viviendas que se encuentran bajo esta modalidad de contrato protegido solamente pueden darse en el rango contemplado por la normativa. Por décadas los incrementos anuales han estado muy por debajo de la inflación y lejos de los precios de mercado. Se estima que casi un millón de personas habitan viviendas con este beneficio en su modalidad actual. Durante la administración del actual alcalde demócrata Eric Adams se decidió revertir en parte esta política e iniciar lo que en la práctica es un proceso de ajuste a los precios de mercado. La propuesta de Mamdani beneficiaría a ese millón de personas para quienes es difícil acceder a créditos hipotecarios. Al mismo tiempo dicha política le pondría límites al poder e influencia amasados por la industria inmobiliaria y su cadena de financiación y bancarización.
La estrategia electoral entrista de DSA consiste parcialmente en usar la plataforma de primarias del Partido Demócrata para disputar puestos de elección popular en la más amplia gama de instancias de representación formal. Como muchos otros partidos a nivel mundial DSA usa estudios demográficos y territoriales para establecer áreas de potencial crecimiento de votos y optimizar la focalización de sus recursos. Mamdani probó que dicha estrategia puede rendir frutos en una escala superior a la de un distrito más pequeño como el que actualmente ocupa en la asamblea estatal. Áreas de Queens y Brooklyn probaron ser clave en la acumulación de votos para Mamdani. Queda por determinar si el éxito en la primaria se podrá replicar en la elección general de noviembre o si los votos obtenidos son el techo del candidato progresista.
El alma electoralista del partido, enfocada en amplificar un mensaje redistributivo y de derechos sociales, convive con una visión de la organización más cercana a la de un movimiento social de base en territorios y redes de organizaciones comunitarias. El ascenso organizacional gatillado por la crisis financiera de 2007-2009 y catalizado por Occupy Wall Street tiene de alguna manera su continuidad en el crecimiento de DSA en Nueva York. No sin tensión una cohorte profesional joven con educación universitaria convive con organizaciones más antiguas de distinto rango como sindicatos de trabajadores municipales, alianzas barriales, redes de solidaridad étnica y racial, grupos de apoyo a inmigrantes, organizaciones religiosas y de diversidad sexual entre otros.
Mamdani proviene de esta tensión en donde la palabra socialismo funciona de manera multivalente. Por un lado el ascenso de Mamdani y de DSA quiere actualizar e insistir en la pregunta lanzada por Michael Harrington en los años sesenta y setenta sobre la brecha entre producción y apropiación de riqueza en el contexto estadounidense. De ahí que el llamado fuera y continúe siendo a la alianza de múltiples sectores sociales para el beneficio de las grandes mayorías de sectores medios y precarizados. Por otro lado, late la pregunta sobre cómo formar cuadros políticos que eviten la osificación burocrática en los cargos públicos y la creación de intereses autónomos y lejanos a la ciudadanía. La palabra socialismo aquí designa para DSA un área en donde la experiencia burocratizada de los socialismos reales del siglo veinte se critica frente a la visión positiva de los estados de bienestar de los países del norte de Europa y al fortalecimiento y extensión de la red de seguridad social del New Deal estadounidense.
Parte del desafío de Mamdani consiste, con apego o no a la palabra socialismo, en el contexto estadounidense y de la ciudad de Nueva York, en un rescate de lo público y un fortalecimiento de la ciudadanía para el apoyo de las mayorías necesitadas. Pero la disputa por los nombres y las palabras sigue siendo clave en la arena política. Como resultado de esta elección primaria ahora circulan a nivel nacional en Estados Unidos los siguientes nombres y palabras: Mamdani, musulmán, socialista, apoya a Palestina.