La educación: negocio para las editoriales privadas
Dennis Saúl Miranda Palomares
Profesor de historia en educación secundaria
El pasado 8 de agosto salió un desplegado en el periódico El Universal en contra de los Libros de Texto Gratuitos (LTG), firmado por una serie de personajes que han estado en lugares clave dentro del gobierno durante administraciones pasadas. En él, emiten una convocatoria a la ciudadanía a rechazar y a repudiar de manera tajante la nueva familia de LTG, porque —según ellos— se oponen “a las instituciones democráticas” y niegan “el respeto a los derechos universales” de niños y adolescentes (NyA).
Quienes firmaron el desplegado, retomaron la narrativa que los medios de manipulación masiva han difundido a todas horas. Han ensuciado la arena política con mentiras, descalificaciones, injurias y prejuicios racistas cuya finalidad esmanipular las mentes de las audiencias y contaminar el debate público y así, difuminar sus más oscuras intenciones. Su falta de vitalidad intelectual, no les ha permitido comprender el proceso de transformación que demanda nuestra sociedad para abatir las desigualdades sociales, mismas que, algunos de los firmantes ayudaron a acrecentar cuando fueron parte del gobierno.
Más allá de los insultos y las peroratas en las que se han empantanado, es importante hacer visible cuáles son las intenciones que subyacen en los descréditos que han hecho. Si queremos comprender la naturaleza de sus propósitos, uno de los hilos a seguir es el dinero, pues, con la elaboración y distribución de los nuevos LTG, se ha cortado de tajo uno de los negocios más lucrativos que habían tenido algunos de los que firmaron el desplegado. No es de extrañar que seencuentren furibundos por haber sido desplazados de las posiciones clave dentro del gobierno y que les permitieron durante muchos años, enriquecerse a costa del trabajo de millones de mexicanos. Demos más fuerza al argumento ypongamos en contexto lo dicho anteriormente.
En 1993, el gobierno presidido por Carlos Salinas de Gortari (CSG), emprendió una serie de cambios en las políticas públicas cuya intención fue consentir la entrada de la iniciativa privada en rubros donde sólo tenía injerencia el gobierno.Uno de esos rubros fue la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos (Conaliteg). Desde ese momento, la elaboración de los LTG para secundaria (misma que se hizo obligatoria en ese año) se dejó a cargo de las editoriales privadas. Fueron ellas, quienes se encargaron de elaborar los LTG para los millones de adolescentes de nivel secundaria en todo el país y, de esta forma, el gobierno “cumplía” con dotar a los adolescentes de una herramienta necesaria para su formación integral.
Sin embargo, en la pasada administración, cinco editoriales privadas fueron beneficiadas con contratos por adjudicación directa en la elaboración de los LTG. Entre las que destacaron: Santillana, Richmond Publishing (perteneciente a Santillana), Mcmillan Publishers, Ediciones Castillo y Ediciones SM. Por ejemplo: Santillana acumuló lacantidad de 981, 899, 139 pesos en la adquisición de 466 títulos para el programa de secundaria 2018-2019 de LTG, junto con 205 títulos más; por su parte, SM ediciones obtuvo por 119 contratos en adjudicaciones directas la suma de 693, 722, 226 pesos, importes nada despreciables. (https://acortar.link/bbWFR9)
Esta última llama la atención porque entre los 255 firmantes del desplegado se encuentra nada más y nada menos que Elisa Bonilla Rius, quien fue directora de la Fundación SM de 2007 a 2016 y directora de Contenidos Educativos de Ediciones SM del 2010 al 2016. Además, desde finales del gobierno de CSG y hasta los comienzos de la administración calderonista fue directora general de Materiales Educativos de la Secretaría de Educación Pública (SEP), finalmente, fuela coordinadora de la construcción del Currículo Nacional de Educación Básica (preescolar, primaria y secundaria) y el de Educación Inicial cuando fue Directora General de Desarrollo Curricular de la SEP de 2016 a 2018.
Lo anterior es una pequeña prueba del negocio tan lucrativo y de quienes se oponen a la elaboración y distribuciónde la nueva familia de LTG. Queda al descubierto que uno de los intereses que guían a los opositores es el afán deenriquecimiento a costillas de la educación y formación de millones de NyA. Bonilla ejemplifica lo que se ha denominadoen las ciencias sociales como la práctica de la puerta giratoria, esto significa que; al salir del sector público, de inmediato pasa a formar parte del sector privado y regresa al sector público.
En esta administración, por primera vez, se intenta que el gobierno elabore los LTG y acabe con el negocio que habían hecho las editoriales privadas en torno a su elaboración. No obstante, los conservadores no abandonarán el campo de batalla y seguirán intentando regresar al poder para aprovecharse de sus puestos públicos y beneficiar a los privados en detrimento de la educación pública de nuestro país.